10 de febrero de 2012

MUSEO DE LOS DÓLMENES DE ANTEQUERA

El Conjunto Arqueológico Dólmenes de Antequera ha quedado situado entre el núcleo originario de la población y la nueva expansión industrial en dirección a la autopista de Málaga (norte-este), siendo la ronda de circunvalación Norte y la antigua carretera de Málaga sus principales límites. La ordenación del conjunto se apoya sobre la calle de acceso en una secuencia longitudinal de aparcamientos para vehículos ligeros, punto de información a visitantes, edificio de instalaciones y aparcamiento para autobuses; confluyendo todos los recorridos peatonales de acceso en una zona central junto a la escultura del caminante desde la que se contempla el conjunto y se inician los distintos recorridos de visita, uno de los cuales conduce al futuro Museo de los Dólmenes de Antequera.
La parcela total tiene una superficie  catastral de 74.946 m2 y dentro de ella, el edificio se nos ofrece como un elemento aislado aunque en posición central, muy visible desde cualquier punto del recorrido y queda definido mediante un volumen complejo que se relaciona con el entorno alineándose con las principales direcciones virtuales presentes en el conjunto (trayectorias solares, elementos de la orografía local, etc.)
En 2009 se redactó un Proyecto Básico de Ordenación del Recinto "Dólmenes de Antequera" que acomete la ordenación paisajística del conjunto y en base al cual, se han llevado a cabo actuaciones recientes como la plantación de olivos y almendros, pavimentación de caminos, etc.
El edificio existente consta de una planta de sótano y dos plantas sobre rasante que van disminuyendo de superficie hasta la altura máxima que llega hasta los 16 metros. La planta sótano tiene una altura libre escasa que va desde 2,90 m. en las vigas descolgadas y 3,50 m. en el resto, mientras que las otras dos plantas tienen alturas libres aptas para el uso que se propone. Nuestra propuesta parte de la aceptación del edificio construido casi íntegramente, sobre el que implantamos el programa propuesto con la intención de potenciar los espacios arquitectónicos ya construidos.




La estrategia de trabajo ha sido la de un paulatino acercamiento al edificio existente desde una perspectiva intencionadamente instrumental, utilizando como principal argumento de proyecto el profundo conocimiento de una realidad constructiva que nos permita la adecuación de los diferentes espacios interiores a los nuevos requerimientos programáticos y normativos, así como la redefinición de la imagen exterior.

Así mismo se  afronta el reto de obtener para el edificio una Calificación de Eficiencia Energética: A, mediante la mejora de todos los elementos pasivos como aislamientos exteriores en fachadas y cubiertas, mejora de las carpinterías y la optimización energética mediante planta enfriadoras por levitación magnética o gas y el uso de la biomasa como combustible.